Un hombre de 35 años, cuya brillante carrera en el crimen duró menos que una oferta del Black Friday, fue detenido este jueves en Tres Cantos tras intentar vender en Wallapop los mismos esquís que presuntamente había robado el día anterior en una tienda de Baqueira. Porque si algo hemos aprendido, es que los ladrones modernos no solo roban, sino que además buscan hacer negocio rápido y sin moverse de casa.
El hombre, en un acto de innovación criminal, decidió que la mejor forma de deshacerse del botín era subirlo a una web donde medio país revisa anuncios cada día. Spoiler: no salió bien.
El golpe maestro de un estratega nato
Todo comenzó el miércoles a las 17:00, cuando un profesor de esquí dejó sus Salomon XS/Race (valorados en 1.200 euros) apoyados en una tienda de la galería comercial Val de Ruda. Bastaron unos segundos para que el ladrón, con la agilidad de un ninja en chanclas, se hiciera con ellos y desapareciera.
La víctima denunció el robo, pero las cámaras de seguridad no pudieron identificar con claridad al genio del delito, ya que, al parecer, el arte de robar esquís es más sofisticado de lo que creemos.
Pero lo mejor llega el jueves: nuestro protagonista decide vender los esquís robados en Wallapop por 400 euros. Y claro, aquí empieza el drama: el propietario original los ve anunciados, con fotos y todo, y decide que esto no puede quedar así.
Wallapop: el CSI de los robos torpes
El profesor llama a su amigo, el abogado penalista Juan Gonzalo Ospina, quien, además de dar clases de esquí, parece ser un experto en cazadores de ofertas. Juntos elaboran un plan maestro: fingir ser un comprador interesado y contactar con el vendedor.
Pero atención, porque aquí el ladrón demuestra su gran capacidad negociadora. Cuando le preguntan si puede incluir los bastones en el pack, sube el precio a 500 euros. Porque claro, si te vas a hundir, que sea con un poco más de margen de beneficio.
El desenlace digno de una serie de Netflix
El ladrón accede a cerrar el trato en la Plaza del Toro de Tres Cantos, donde le espera su comprador falso… y también la Guardia Civil, que estaba más que lista para ofrecerle un viaje gratis a la comisaría. Al comprobar que los esquís eran los robados, los agentes procedieron a su detención inmediata, en lo que podría ser el arresto más fácil de la semana.
Ahora se investiga si este hombre ha innovado en más delitos o si simplemente es un genio incomprendido del crimen torpe.
Moraleja: Si vas a robar algo caro, al menos no lo pongas en Wallapop al día siguiente con tu ubicación real. O sí, así nos das titulares como este.